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Descripción

El juego de la botifarra es un juego de cartas, muy popular en Cataluña y norte de provincia de Castellón y algún lugar de Aragón. Es un juego para cuatro jugadores (en la modalidad normal), que van en parejas.

Jugadores

Se juega con cuatro jugadores, que formando pareja, se sentarán el uno delante del otro.

Cartas

Se utiliza una baraja de 48 cartas formada por cuatro palos (Oros, Copas, Espadas y Bastos) con 12 cartas cada uno.

Objetivo de la partida

El objetivo de la partida es llegar a los 101 puntos antes que la pareja contraria.

Puntuación

El valor de cada una de las cartas és: Manilla (9), 5 puntos As (1), 4 puntos Rey (12), 3 puntos Cavallo (11), 2 puntos Sota (10), 1 punto Las cartas del 2 al 8 no tienen ningún punto. Por cada baza ganada se suma 1 punto adicional. Dentro de un mismo palo, el orden de las cartas de más alta a más baja es el siguiente: 9, 1, 12, 11, 10, 8, 7, 6, 5, 4, 3 y 2. Esto significa que en cada mano o edad hay 72 puntos a repartir entre las dos parejas. La pareja ganadora de cada mano, se apuntará la cantidad de puntos que pase de 36. Hay que tener en cuenta que esta cantidad se deberá multiplicar por dos, cuatro u ocho si ha habido un contro, recontro o San Vicenç. Este resultado se deberá doblar si el triunfo es botifarra.

Mecánica de juego

Antes de empezar a jugar una partida, hay que establecer qué jugador tiene que ser el primero en repartir las cartas y elegir triunfo o triunfo. Por eso uno de los cuatro jugadores atribuye un palo a cada jugador y aleatoriamente, gira una carta de la baraja. Aquel jugador que tenía atribuido el palo de la carta girada, será el primero en repartir las cartas.

Antes de repartir las cartas

El jugador situado a la izquierda del que elegirá el triunfo mezclará las cartas. Cuando lo haya hecho las dejará en la tabla hacia abajo para que su compañero las corte.

Repartir las cartas

El jugador que de elegir el triunfo tomará y las cartas y las repartirá sin mirarlos ni mostrar a los otros jugadores, de cuatro en cuatro sucesivamente a cada jugador comenzando por el que tiene situado a su derecha hasta repartir las 48 cartas. En consecuencia, en total dará tres vueltas enteras en sentido antihorario, repartirá en total 12 cartas a cada jugador y el jugador que reparte se quedará las últimas cuatro cartas.

Escojer el triumfo

Una vez repartidas las cartas y antes de empezar a jugar, hay que escoger triunfo. El jugador a quien corresponda elegir triunfo (el mismo que ha repartido), ya la vista de las cartas que tiene en la mano, tendrá que escoger él el triunfo, o delegar al compañero. Para indicar el triunfo que se ha escogido, hay que decir en voz alta el palo correspondiente: oros, copas, espadas o bastos. El palo que se haya escogido es el que manda en la mano. También existe la opción de decir "botifarra". En este caso no hay ningún palo que mande sobre los demás. En caso de pasar el turno al compañero, éste se ve obligado a hacer triunfo escogiendo una de las opciones anteriores. (Oros, Copas, Espadas, Bastos o Butifarra). Si se escoge butifarra, la cantidad de puntos que se apuntará la pareja ganadora de la mano será doble.

Contro, recontro i Sant Vicenç

Una vez se ha escogido triunfo la pareja contraria puede contrar. Contrar, quiere decir que la pareja que gane esta mano, sumará el doble de puntos, o el cuádruple si se ha hecho botifarra. Para contrar, hay que decir claramente: "controlar". Si no se quiere contrar, se dará un golpe con la mano sobre la mesa. Puede contrar cualquiera de los jugadores de la pareja que no ha hecho baza. Sólo se puede contrar una vez en cada mano, es decir, si un jugador ha contrado, su compañero ya no lo podrá hacer. Una vez la mano está contrada, los componentes de la pareja a quien ha tocado repartir y hacer triunfo, pueden recontrar. Recontrar quiere decir que la pareja que gane sumará los puntos de la mano multiplicados por 4, o por 8 si es botifarra. Por recontrar, hay que decir claramente: "recontro". Si no se quiere recontrar, se dará un golpe con la mano sobre la tabla. Podrá recontrar cualquiera de los jugadores de la pareja que no ha contrado. Sólo se puede recontrar una vez en cada mano. Sólo si la mano está recontrada y no es botifarra, cualquiera de los jugadores de la pareja que ha contrado podrá decir "San Vicenç", en este caso los puntos se multiplicarán por 8. Si no se quiere hacer Sant Vicenç, se dará un golpe con la mano sobre la mesa.

Jugar las cartas

Una vez elegido el triunfo y contrado, recontrar o San Vicente, ya podemos empezar a jugar las cartas. El primer jugador en tirar una carta, es lo que está a la derecha de quien ha repartido, por ello, escogerá una de las que tiene en la mano y la dejará delante suyo sobre la mesa cara arriba. A continuación, el resto de jugadores irán jugando por orden contrario al de las agujas del reloj, hasta completar la baza. La pareja que haya ganado la baza, recogerá las cartas y las guardará boca abajo en un piloto. El jugador que gane la baza empezará la siguiente, y así hasta jugar todas las cartas. Las cartas ya jugadas y depositadas en la pila de cada pareja, no se podrán consultar, a excepción de la última basa añadida a cada pila.

Recuento de puntos i continuación de la partida

Una vez jugadas todas las cartas se contarán los puntos que ha hecho cada pareja, la pareja que haya ganado la mano se anotará los puntos correspondientes. A continuación, el jugador que ha repartido y escogido triunfo en la mano anterior será el encargado de mezclar las cartas, su compañero de cortar la baraja, y el de su derecha de repartir y escoger triunfo, y así sucesivamente hasta el final de la partida.

Final de la partida

La partida acaba cuando una de las parejas ha conseguido superar los 100 puntos.

Inicio de una nueva partida

Si una vez terminada una partida se quiere empezar otra (y si los jugadores y las parejas son los mismos) se continuará el mismo procedimiento de mezclar el último que ha hecho triunfo, y repartirá y hará triunfo el jugador de su derecha.

Otros comentarios

Jugando a la Butifarra, hay que tener también en cuenta que está prohibido hablar, enseñar las cartas y hacer señales y comentarios que puedan indicar qué cartas tiene un jugador o las propias, o bien el acierto o desacierto de una jugada. Sin embargo, es muy normal hacer, siempre con la medida adecuada, comentarios durante la partida, lo que ayuda a dar un ambiente más entretenido al juego. La butifarra es un juego de estrategia, y como tal, antes de tirar una carta hay que pensar bien cuál es la opción más conveniente, ya que una vez hemos tirado una carta ya no se puede recoger.

Reglamento

Como resumen podemos decir que únicamente estamos obligados a matar las cartas de los contrarios, no las del compañero y que siempre (si tenemos) tenemos que tirar cartas del palo de salida. Las normas para jugar las cartas en la morcilla son diferentes a lo largo del territorio. Se distinguen dos grandes variantes.

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